Orígenes y desarrollo de una política científica nacional en Chile: Conicyt, 1967-1981

Abstract

Resumen En 1967, la fundación de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica constituyó un hito al crearse un organismo nacional y público, distinto al universitario, que coordinó y financió la actividad científica-tecnológica, vinculándola al desarrollo productivo en Chile, y a la historia de los consejos de investigación latinoamericanos. La Comisión lideró un exigente proceso al debatir los contenidos de una política científica en un periodo en que Chile experimentó modelos de desarrollo político-económico opuestos que condicionaron su formulación y objetivos. Este artículo caracteriza los orígenes y desarrollo de esta comisión desde 1967 hasta 1981, cuando al crearse el Fondo Nacional de Ciencia y Tecnología se inicia una nueva etapa institucional.

Disposiciones subjetivas a la precariedad en la academia en Chile: entusiasmo, mérito y asociatividad

“…En Chile, la autonomización y mercantilización de las universidades durante el período de Dictadura (1973Dictadura ( -1989 favoreció la validación de este modelo managerial 2 2 Para mayor detalle sobre este proceso, se puede revisar el decreto de Ley nº 3.541, promulgado en 1980, que posibilitó la adaptación de la educación superior al nuevo modelo de libre mercado, haciendo de las universidades el espacio ideal para adoptar las principales sugerencias del NMP. Un punto central de este decreto fue reestructurar la relación entre el Estado y las universidades, mediante el fortalecimiento del sistema local de subsidios estatales en base al desempeño, que ya había empleado la Comisión Nacional de Investigación científica y tecnológica (CONICYT) desde 1967, para financiar becas de formación y, principalmente, proyectos de investigación básica y aplicada en Chile (Steanmans 1969, Zárate et al 2022.…”

“…Foro de Educación, v. 20, n. 2, julio-diciembre / july-december 2022, pp. 85-106. e-ISSN: 1698-7802 (Fardella, 2020;Zárate et al 2022). Por un lado, este escenario posibilitó la transformación de las universidades en prestadoras de servicio y, en consecuencia, abrió el camino hacia la paulatina flexibilización de las plantas académicas, que permitió delegar las responsabilidades de investigación, docencia y vinculación a los prestadores de servicios individuales (Bernasconi, 2015).…”