Neuroimaging Chronic Pain: What Have We Learned and Where Are We Going?

Abstract

Advances in neuroimaging have helped illuminate our understanding of how the brain works in the presence of chronic pain, which often persists with unknown etiology or after the painful stimulus has been removed and any wounds have healed. Neuroimaging has enabled us to make great progress in identifying many of the neural mechanisms that contribute to chronic pain, and to pinpoint the specific regions of the brain that are activated in the presence of chronic pain. It has provided us with a new perception of the nature of chronic pain in general, leading researchers to move toward a whole-brain approach to the study and treatment of chronic pain, and to develop novel technologies and analysis techniques, with real potential for developing new diagnostics and more effective therapies. We review the use of neuroimaging in the study of chronic pain, with particular emphasis on magnetic resonance imaging.

Neuroimagen de la fibromialgia: una enfermedad del cerebro

“…En consecuencia, para comprender y aclarar su neuropatofisiología, debe hacerse uso de diversas medidas de neuroimagen (47). En este sentido, la RM es un instrumento versátil de estudio en vivo para ampliar el conocimiento y comprensión del procesamiento central de la nocicepción en la FM (34,36,45,47), y qué circuito neural patofisiológico se involucra en el mantenimiento del dolor (47). Los resultados con RM craneal enfatizan la alteración de un amplio circuito neural implicado en la nocicepción (11,35,73,89) justificando que la FM es un trastorno de sensibilización del SNC (37) y, consecuentemente, un trastorno del cerebro (89).…”

“…El actual conocimiento de las bases neurales del dolor se ha incrementado sustancialmente por el exponencial desarrollo de la neuroimagen, funcional y estructural, y en especial por la gran versatilidad de la información que proporciona la Resonancia Magnética (RM) (4,3,45) al permitir obtener medidas funcionales, moleculares y anatómicas (11,45). En primer lugar, la RM posibilita el estudio indirecto y no invasivo de la actividad neural metabólica mediante la Resonancia Magnética Funcional (RMf) (3,4,11,15).…”

“…Dicha técnica es extraordinariamente útil para estudiar la respuesta cerebral al dolor agudo o inducido en pacientes con dolor crónico, aunque no parecer ser suficientemente adecuada para monitorizar repetidamente los cambios de la respuesta cerebral en dichos pacientes (4). Un procedimiento alternativo y más apropiado para dicho objetivo es la angiografía en 3D por RM sin medio de contraste por Rotación Arterial (siglas en inglés ASL) (4,36,45,46). La 3D ASL proporciona una medida más directa y selectiva para visualizar y cuantificar el rCBF de los vasos del parénquima al utilizar el agua presente en la sangre como contraste endógeno (36,46) y que actúa como un trazador de difusión (4).…”

“…Esta puede medirse en base a la dependencia o relación temporal de la actividad neuronal observada, mediante las fluctuaciones de la señal BOLD en reposo de baja frecuencia, entre múltiples regiones cerebrales anatómicamente separadas (3,36,45,47). Así, la RMf en reposo permite estudiar la conectividad funcional cerebral intrínseca de múltiples circuitos cerebrales y su relación con el dolor espontáneo de los pacientes con FM (12,36,(47)(48)(49).…”

“…Así, se pueden obtener medidas del volumen o cantidad de sustancia gris (VSG) o de sustancia blanca (VSB) de múltiples regiones cerebrales mediante la técnica denominada Morfometría Basada en el Voxel (siglas en inglés VBM) (4,11) y el análisis del grosor cortical (45). Un segundo método de estudio estructural es el de Imágenes con Tensores de Difusión (DTI), sensible a la difusión del agua libre en el tejido neural, que permite estimar la integridad de las fibras de sustancia blanca y el estudio de la conectividad estructural (tractografía) del cerebro al elucidar la orientación de los tractos de sustancia blanca (4,11).…”