“…Por tanto, desde los estudios de la Escuela de Chicago, y la teoría del ciclo de las relaciones raciales de Park, se puso especial énfasis en la geografía de los asentamientos de los inmigrantes. Esta importancia se ve reflejada en los trabajos de investigación sobre los latinos en general y sobre los mexicanos en particular, 8 ya que hay un conjunto de estudios orientados a analizar el efecto de vivir en enclaves étnicos producto de la permanencia de patrones de asentamiento segregado (Bogardus, 1930;Crowder, Hall y Tolnay, 2011;Ebert y Ovink, 2014;Ellis et al, 2004;Gamio, 1930;Harner, 2000;Lavine, 2005;Pearson-Merkowitz, 2012). 9 En las investigaciones sobre segregación hay mayor énfasis en la dimensión espacial (denominada como segregación residencial), quizá por la fuerte correlación que los estudios muestran, entre lugar de residencia y lugar de trabajo en el caso de los inmigrantes, no solo en los Estados Unidos, sino en otros países con inmigración, o quizá por la permanencia de los patrones residenciales segregados en la sociedad estadounidense, ya que mientras la segregación en el trabajo ha declinado en los últimos cincuenta años, la segregación residencial se mantiene (Ellis et al, 2004).…”