“…El reconocimiento de que los roedores aprenden tanto a partir de claves visuales alocéntricas como de claves propioceptivas egocéntricas, y pueden utilizar estrategias basadas en los dos tipos de información, ha llevado a los investigadores a preguntar bajo qué condiciones se elige utilizar una u otra. En este sentido, se han identificado una serie de variables que influyen sobre la probabilidad de que los roedores utilicen estrategias egocéntricas en el laberinto de brazos radiales (e.g., Dale e Innis, 1986;Einon, 1980;Foreman, 1985;Hall y Berman, 1995;Hodges, 1996;Olton, Collison y Werz, 1977;Pico y Davis, 1984;Rossi-Arnaud, Fagioli, S. y Ammassari-Teule, 1991;Saavedra, Pinto, Marchant y Urzúa, 1999;Yoerg y Kamil, 1982). Se ha hipotetizado (e.g., Yoerg y Kamil, 1982;Saavedra y cols., 1999) que en muchos casos se privilegia el uso de estrategias egocéntricas por su funcionalidad, es decir, se debería al resultado de un análisis de costo-beneficio, producto del cual se privilegia la estrategia egocéntrica ya que requiere de un procesamiento menos complejo y permite un abastecimiento óptimo, en el menor tiempo posible y minimizando el número de errores.…”