Existen simuladores que dan como resultado las áreas de afectación en caso de la liberación de una sustancia química peligrosa, en base a las características fisicoquímicas, condiciones meteorológicas que prevalecen en el lugar de la emisión, las características de la fuente, por ejemplo, tipo de tanque de almacenamiento, volumen y masa, el estado físico de la sustancia química, la presión y temperatura a la que se encuentra dentro de este y la forma de su liberación. Los resultados de la simulación también son parte del estudio de riesgo ambiental que tiene que presentar la empresa a las autoridades competentes para que sea autorizada su construcción y operación.