“…En relación al tratamiento de las adenopatías causadas por micobacterias atípicas, se ha evidenciado que la exére-sis completa se ha asociado a mayor tasa de curación que el tratamiento médico o la no intervención 4,16,28 ; a pesar de ello, existen situaciones en las que el tratamiento médico está indicado, como: linfadenopatías bilaterales, cuadro clínico con más de un mes de evolución, múltiples fistulizaciones, exéresis incompleta o recidiva postoperatoria, e impedimento para realizar la intervención quirúrgica (alto riesgo de complicaciones en ganglios de difícil abordaje) 29 . Actualmente, el esquema de tratamiento médico empírico para micobacterias atípicas se basa en la administración de un macrólido (azitromicina o claritromicina) asociado con etambutol, ciprofloxacina, rifampicina o rifabutina, durante tres a seis meses 4,28,29 . Particularmente, en este caso se le realizó la exéresis de los ganglios inguinales izquierdos debido a la actividad metabólica que presentaban en la PET y a su accesibilidad, lo cual no mejoró el cuadro clínico sino hasta la administración de pirazinamida; obteniendo una respuesta favorable a un mes de tratamiento.…”