“…El informe es concluyente: para que dichos espacios hayan alcanzado esos estándares ha necesitado de una solvencia de su capital humano en alumnos y docentes, presupuesto y liderazgo y visión. Esto ha llevado a autores como Núñez & Passailaigue (2014) a señalar que la inteligencia organizacional debe estar en posición de una identidad cultural explícita, teórica, práctica y coherentea, de tal manera que pueda distinguirse de las otras instituciones universitarias y en este proceso, la investigación se ha convertido en importante generador de conocimientos.La investigación forma parte importante de las actividades docentes al interior de las universidades, en tanto es una de sus funciones más trascendentes, por lo que debe desarrollar un conjunto de competencias que lo capaciten para abordar con éxito, diversidad de problemas de investigación(Oviedo & Pastrana, 2014;Marrero & Pérez, 2014;Padrón, 2002). En esta línea es que Tobón, (2013) afirma que, en consideración a las necesidades del desarrollo económico, social, político y empresarial, es necesario desarrollar competencias investigativas que puedan ser capaces de entender y adaptarse a los cambios constantes que ocurren en el mundo, de manera que puedan llevar a las universidades a adoptar programas de mejora continua que los direccionen hacia el logro de la calidad educativa.…”