“…A ello se suma el foco en las características personales de los candidatos (personalización), que también influye en el debate televisado (Zamora Medina & Rebolledo, 2019), y el mayor espacio dado a las soft news, que dejarían al público con escasa información sustancial durante la campaña (Reinemann et al, 2012). Si bien no hay pruebas concluyentes de que estas tendencias sean crecientes en todas las democracias occidentales, sí es claro que su presencia se vuelve más constante, pronunciada y visible en la proximidad de procesos electorales (de Vreese et al, 2017).…”