“…La primera, denominada «la teoría de recursos y capacidades», en la que se considera a los individuos como activos que pueden convertirse en fuente de ventaja competitiva al ser gestionados por medio de PAR, puesto que los conocimientos y las habilidades que desarrollan contribuyen a que se conviertan en valiosos, raros, difícilmente imitables y apropiables por la organización (Barney, 1991;Wong y Gao, 2014). La segunda, conocida como «enfoque AMO» -por sus siglas en inglés, ability, motivation, opportunity-, sugiere que las PAR conducen a la selección de una fuerza laboral con habilidades superiores, en la cual las oportunidades de capacitación más sólidas darán como resultado una mayor productividad y, de manera similar, las prácticas de compensación apropiadas mejorarán el desempeño a través de una mayor motivación (Haar et al, 2021).…”