“…Estos modos de razonar cumplen con tres características: (1) Son funcionales, en tanto que permiten a las personas describir, explicar y predecir fenómenos del mundo en el que viven; (2) son transversales, en el sentido de que subyacen tras explicaciones de diferentes dominios del conocimiento; y (3) son conflictivos, en el sentido en que las expresiones de dichos obstáculos pueden dificultar el aprendizaje o la aceptación del modelo científico que se quiere enseñar (González Galli y Meinardi, 2015). Para el caso de la enseñanza de la evolución se han descrito varios modos de razonar que podrían funcionar como OE, entre los que se encuentran el finalismo (Gresch, 2020; ENSEÑANZA DE LAS CIENCIAS, 41-1 (2023), 5-23 Meinardi, 2015;Silva et al, 2021;Werth y Allchin, 2020;Wingert y Hale, 2021) y el esencialismo (Gelman y Rhodes, 2012;González Galli et al, 2018;Wilkins, 2013).…”