“…Si bien es cierto que la RSE enfoca el sentido del cuidado ambiental desde la perspectiva de la naturaleza, su sentido ético y filosófico permite una integración hacia los entornos técnicos y los puestos de trabajo. Esto apuntaría a: un desarrollo social sostenible del quehacer operativo y administrativo de las mismas empresas; la capacidad de autorregulación del personal para potenciar sus competencias y desempeño laboral; la construcción de una cultura organizacional generadora de valores, sentidos y significados en función del trabajo; además del desarrollo de las capacidades de absorción, transformación y cambio de la organización como un todo que evoluciona constante y dinámicamente con los ambientes externos renovables propio de la naturaleza productiva y competitiva de los mercados económicos (Guerci, Longoni and Luzzini, 2016;Kunz, 2020;Farooq and Salam, 2021;Jamal et al, 2021;Madani, 2021;Rehman et al, 2021;Úbeda-García et al, 2021;Shah et al, 2021;Sarwar, Ishaq and Franzoni, 2022).…”