“…Entonces, más exactamente, las placodas neurogénicas (concentraciones focales de producción de neuronas a partir de engrosamientos ectodérmicos), son una de las exclusividades de los vertebrados (Begbie et al, 1999;Shimeld & Holland, 2000), mas no las placodas sensoriales ni la capacidad de formar neuronas a partir del ectodermo. (Baker & Bronner-Fraser, 2000;Baker et al, 1999), pues los ganglios geniculados, petrosos y nodosos se encargan de relevar información gustativa y viscerosensitiva, desde la cavidad oro-faríngea a núcleos del rombencéfalo (Begbie & Graham, 2001a), mientras que las Placodas Trigeminales forman neuronas sensitivas que innervan la cara y las mandíbulas (incluyendo neuronas sensitivas del lóbulo oftálmico del ganglio trigeminal). Las placodas neurogénicas dorsolaterales se desarrollan a lo largo del sistema nervioso central, mientras que las epibranquiales lo hacen justo por encima de las hendiduras branquiales (Begbie et al, 1999;Kardong, 1999;Shimeld & Holland, 2000), exactamente en el margen dorsoanterior de los arcos branquiales, en contacto próximo con dos tejidos embrionarios: las crestas neurales craneales y el endodermo faríngeo.…”