“…El establecimiento de cultivos genera principalmente remoción de la vegetación de ribera, lo que promueve la erosión de las orillas y el incremento de la temperatura, y así un aumento en la sedimentación de los cuerpos de agua (Corbi et al, 2013). Sumado a esto, la aplicación de herbicidas y fertilizantes necesarios para el desarrollo de los cultivos aumenta las concentraciones de nitrógeno, fósforo y potasio, que a su vez favorecen la actividad de los microorganismos, lo que genera una disminución en las concentraciones de oxígeno disuelto (Melo et al, 2017). Aunque actualmente no se registran vertimientos industriales en el río Quenane-Quenanito y las actividades petroleras se enfocan únicamente en la captación de agua (Vargas-Pineda et al, 2020), es importante realizar el seguimiento de los organismos bentónicos, pues en estudios realizados en ríos afectados por derrames de hidrocarburos en Estados Unidos se encontró que las especies de Ephemeroptera estuvieron ausentes hasta nueve meses después de ocurrido un derrame (Crunkilton & Duchrow,1990).…”