“…Actualmente existe una alta dependencia de las PYMEs con respecto a este tipo de financiación, siendo los préstamos bancarios uno de los instrumentos financieros más utilizados por los emprendedores españoles (Hernández, 2014;CESGAR, 2019), con la particularidad de que su obtención suele estar sujeta a la aportación de avales o garantías. Para solventar este problema surgen los sistemas de garantía, que a veces se articulan en torno a las Mutual Guarantee Institutions (MGI), como se denomina en algunos países europeos, o las SGR españolas, que con su garantía apoyan la financiación de nuevos proyectos empresariales (Santero-Sánchez, De la Fuente-Cabrero, Laguna-Sánchez, 2016, Pombo, Molina y Ramírez, 2006, 2007. El aval de las SGR no solo posibilita el acceso al crédito, sino que mejora sus condiciones en cuanto a plazo y a tipo de interés, de los préstamos bancarios a las PYME (De la Fuente-Cabrero, 2007;Pombo, Molina y Ramírez, 2008;Columba, Gambacorta y Mistrulli, 2010;Bartoli, Ferri, Murro y Rotondi, 2013;De la Fuente-Cabrero, Laguna-Sánchez y Villacé-Molinero, 2013).…”