“…El sector de la sanidad, tras la crisis del COVID 19, está atravesando un tiempo complejo. Por un lado, se cumplen las previsiones que en 2018 publicó la EFQM ( European Foundation for the Quality Management ) sobre las megatendencias y los riesgos asociados y, por el otro, las instituciones sanitarias se encuentran exhaustas después de una crisis global tanto sanitaria como sociosanitaria que ha hecho que no solo el 60% de los profesionales muestren síntomas de burnout 1 , 2 sino que éstos se replanteen su propósito.…”