A l analizar una disciplina desde el punto de vista filosófico se presenta en primer plano el problema del status ontológico de su objeto de estudio, de sus conceptos, enunciados, leyes y estructuras. Según U. Moulines el análisis y clarificación de ese status ontológico corresponde, en primer término, al científico que trabaja y desarrolla esa disciplina, pero que por motivos prácticos no lo hace, ya que se dedica esencialmente a la investigación propia de su área, "por ello es legítimo y hasta fructífero que el filó-sofo de la ciencia se ocupe de analizar los compromisos ontológicos que en principio el científico hace o debería hacer." 1 Los elementos componentes de la disciplina deben ser objetivos, en el sentido de que versan sobre una parte de la realidad y las leyes de la teoría expresan unas relaciones entre objetos, dadas independientemente de la voluntad del sujeto. Para nuestro análisis es importante no confundir la relación de los contrarios subjetivo-objetivo con la de ideal-objetivo. La primera expresa un par de categorías contradictorias de sujeto y objeto dentro del esquema del conocimiento que se excluyen mutuamente; podemos decir que una visión subjetiva ocurre cuando el objeto se pierde en el sujeto cognoscente y lo contrario, lo objetivo, se da cuando el objeto es opuesto claramente al sujeto, está frente al sujeto y se da como es (lo que no implica que se dé totalmente en toda su complejidad), además de que puede ser captado como tal no sólo por el sujeto que conoce, sino por todo sujeto potencial de la comunidad epistémica, lo que L. Villoro llama intersubjetividad. Por otro lado, lo ideal y lo objetivo no son categorías contrarias, no se excluyen la una a la otra, sino que cada una de ellas expresa una relación diferente; la primera, una relación genética y la segunda, como ya se indicó, una forma de existencia opuesta al sujeto; algo ideal, genéti-camente dependiente del sujeto y por consecuencia podría decirse subjetivo, puede ser objetivo en cuanto que en últi-ma instancia depende de la realidad y puede llevar una existencia independiente del sujeto, funcionalmente actúa opuesto al sujeto y en esa instancia puede ser investigado por este último, el cual tiene que descubrir las relaciones y funciones de los entes ideales, baste con recordar los números en las Matemáticas o los objetos de la Lógica, que son entes ideales, pero que tienen una existencia objetiva. Después de esta breve aclaración, observamos que si utilizamos el método fenomenológico para el estudio del objeto de la Bibliotecología, encontramos, desechando todos los conocimientos anteriores, todos los "prejuicios", con palabras de Husserl, encerrando en un paréntesis todo juicio sobre esta disciplina, que la Bibliotecología trata de seres humanos, de bibliotecas, de documentos, de información y conocimientos que buscan esos seres humanos en esos documentos y de actividades de las bibliotecas para que Un análisis filosófico de la Bibliotecología 9
RESUMENEn el presente trabajo se busca la fundamentación ontológica de la Bibli...