“…Martins y sus colaboradores reportan un deterioro en dicho cordón que produce un atrapamiento, el cual puede incluir al estómago, duodeno o incluso al colon. 2 En esta publicación se citan pocos antecedentes (nueve referencias), los cuales sólo mencionan en sus títulos el desarrollo de cuadros clínicos de obstrucción intestinal que requirieron manejo quirúrgico y donde se encontraron anomalías asociadas al ligamento redondo. [3][4][5][6][7][8] Mencionan que este menoscabo fue descrito por primera vez por Langenbeck en 1894, que a su vez es referido en el artículo original de De Yoe y Ianacone de 1951, haciendo descripción de una estenosis pilórica secundaria al defecto del ligamento redondo.…”