“…No obstante, estos síntomas no son específicos y debe realizarse el diagnóstico diferencial con fístula traqueoesofágica, reflujo gastroesofágico, obstrucción gastrointestinal, fístula gastrointestinal y neumonía aspirativa. [5][6][7] Se han utilizado, para el diagnóstico, la broncoscopía, la broncografía, la colangiografía, la tomografía computada y la resonancia magnética nuclear. Sin embargo, la broncoscopía ha sido la más utilizada (52%) como método diagnóstico, seguido por la colangiografía y la broncografía.…”