Silvestre Revueltas’s Second String Quartet premiered in Mexico City 1931, and was played a year later at Aaron Copland’s Yaddo Festival in Saratoga Springs. When Copland heard the work, he described it as “very amusing... a little Mexican drama, and I could easily imagine it being danced.” Copland’s description treats the quartet as a unified whole that all functions seamlessly under a US gaze. But he missed many elements of the music—most glaringly, the canción that forms the primary theme (and also subtitle) of the first movement, “Los Magueyes.” Copland’s essentializing take was common for Revueltas reception: critics highlighted his supposed naturalness and naiveté, thereby minimizing Revueltas’s labor and skill and denying the full range of musical features, which are by no means limited to sounds associated with “Mexicanness.” This article explores several alternative analytical interpretations, focusing especially on strategic alterity and composerly ambivalence. These frames, strategic alterity and ambivalence, both embody multiplicity: ambivalence is structured by multiple feelings or ideas in tension, an experience of contradiction. And strategic alterity involves a composer undermining some aspect of themselves to meet others’ expectations. Both implicate multiple interpretive possibilities. Polysemic readings require acknowledgement of analysis as incomplete, in progress or shifting. These multiple understandings defy some of music analysis’s deepest impulses: clarity, truth, and a unified explanatory power. This article leans into this incomplete status, with an aim of re-examining assumptions and attending to a different set of musical meanings.
Keywords: musical modernism, strategic alterity, ambivalence, Mexico, Aaron Copland, United States, Carlos Chávez
Malinterpretando a Revueltas: Polisemia y el Cuarteto de cuerda nº 2
Resumen
El Cuarteto de cuerda nº 2 de Silvestre Revueltas se estrenó en Ciudad de México en 1931 y se interpretó un año más tarde en el Yaddo Festival de Aaron Copland en Saratoga Springs. Al escuchar la obra, Copland la describió como “muy entretenida… un pequeño drama mexicano, me lo puedo imaginar fácilmente bailado”. La descripción de Copland trata el cuarteto como un todo unificado que funciona perfectamente bajo la mirada estadounidense. Pero no detectó muchos elementos musicales –sobre todo la canción que da lugar al tema principal del primer movimiento, “Los Magueyes”–. La interpretación culturalmente estereotipada de Copland es típica en la recepción de Revueltas: los críticos resaltaban la supuesta naturalidad e inocencia, minimizando el esfuerzo y la habilidad de Revueltas e ignorando el abanico completo de características musicales, que van mucho más allá de sonidos asociados a la “mexicanidad”. Este artículo investiga varias interpretaciones analíticas alternativas, centrándose en la alteridad estratégica y la ambivalencia compositiva. Estos marcos de referencia incorporan la multiplicidad: la ambivalencia deriva de tensiones entre múltiples sentimientos o ideas, de una experiencia contradictoria. Y la alteridad estratégica resulta de la supresión por parte del compositor de algún aspecto de sí mismo para adaptarse a las expectativas de los otros. Ambos marcos implican múltiples posibilidades de interpretación. Las lecturas polisémicas exigen aceptar el análisis como incompleto, en proceso y cambiante. Este tipo de conocimiento múltiple desafía a algunos impulsos profundos del análisis: claridad, verdad y poder interpretativo unificado. Este artículo se apoya en este estado incompleto con el objetivo de re-examinar supuestos y prestar atención a otro conjunto de significados musicales.
Palabras clave: modernismo musical, alteridad estratégica, ambivalencia, México, Aaron Copland, Estados Unidos, Carlos Chávez