“…Permitiendo a su vez en la institución una solidez necesaria para ser líder, no solo competente sino competitiva, estableciendo una cultura de trabajo basada en la mejora continua, simplificando el trabajo administrativo y operativo, asegurando que el proceso de aprendizaje que reciben los alumnos sea conforme al modelo educativo de la institución, creando condiciones de eficiencia con ello los indicadores de reprobación, deserción, eficiencia terminal y titulación a través de un nivel educativo de calidad, adquiriendo prestigio en la sociedad que aporte a los egresados de la organización educativa más oportunidades de inserción en el sector productivo (Jiménez-Bucarey et al, 2023).…”