“…La mayoría de los estudios no ha dirigido su atención directamente sobre el ámbito del parentesco. Enmarcadas en proyectos de investigación con distintos objetivos y no siempre con continuidad en el tiempo, las relaciones de parentesco han sido analizadas como parte de la estructura social de las comunidades indígenas (Beltrán, 2002;Castro, 1981;Martínez, 1975;Mostny, 1954;Solc, 2011), en relación al uso y herencia de las tierras (Bernhardson, 1985;Castro y Bahamondes, 1987, 1988Cerna et al, 2013), el funcionamiento de las actividades productivas (González, 1995a(González, , 1995bMoreira y Cerna, 2018;Platt, 1975), los mecanismos de integración social (Cerna et al, 2018), la ritualidad (Serracino, 1985) o el género (Carrasco, 1998;Gavilán, 2002Gavilán, , 2020Carrasco y Gavilán, 2009Gavilán y Carrasco, 2018). Como consecuencia, la información disponible sobre parentesco es dispar y diversa, se encuentra en un nivel descriptivo, y las categorías analíticas utilizadas son de distinta índole, pues, salvo excepciones, no se define con claridad de qué manera son entendidos ciertos conceptos antropológicos del parentesco.…”