Introducción y Objetivos El reflujo vesicoureteral posterior al trasplante renal es una complicación poco frecuente. Esa patología favorece las infecciones urinarias y el deterioro de la función renal, dependiendo de las características y del grado de reflujo, se puede realizar el tratamiento. Sin embargo, el manejo definitivo consiste en la reintervención quirúrgica ya sea por vía endoscópica o abierta. No se tiene conocimiento sobre las características clínicas, así como la función renal y la prevalencia de infecciones urinarias en esa población. El objetivo de este trabajo, fue describir las principales características clínicas relacionadas con la función renal pre y post reimplante ureteral y la prevalencia de infecciones urinarias y hospitalizaciones en pacientes trasplantados renales con reflujo vesicoureteral.
Materiales y Métodos Estudio descriptivo de serie de expuestos, realizado en pacientes trasplantados renales con reflujo vesicoureteral sometidos a ureteroneocistotomía. Las principales variables de estudio fueron función renal, número de infecciones urinarias y necesidad de hospitalización, previo al reimplante ureteral y a los tres meses posteriores. Se tomó la totalidad de pacientes operados entre los años 2014 y 2016. Se realizó un análisis descriptivo con medidas de frecuencia y tendencia central y una comparación de los resultados clínicos según la técnica quirúrgica usada (abierta o endoscópica).
Resultados en el estudio se incluyeron 16 pacientes trasplantados renales con reflujo vesicoureteral del injerto como complicación postoperatoria que posteriormente fueron sometidos a la ureteroneocistostomía. El promedio de edad de la población fue de 43 años (D.E. ± 14,5), trasplante renal con donante cadavérico en un 87,5% y vivo del 12,5%. Según el grado de reflujo vesicoureteral previo a la corrección, el 41,6% eran grado III, seguido por grado II en el 25% y grado IV en el 25%. El abordaje quirúrgico de elección para el reimplante fue abierto en un 68,7% y endoscópico en el 31,2% de los casos. La función renal posterior al reimplante muestra tendencia a la mejoría con un promedio en el nivel de creatinina pre en 1.66 (D.E. ± 1,19) y post reimplante ureteral en 1.5 (D.E. ± 0,64). Por otra parte, las infecciones urinarias disminuyeron de 4.5 (D.E. ± 3,2) a 1.1 (D.E. ± 1,36) por año y el número de hospitalizaciones se redujo de 2.8 (D.E. ± 3,2) a 0.9 (D.E. ± 1,28) en el seguimiento.
Conclusiones en los pacientes con trasplante renal y corrección quirúrgica del reflujo vesicoureteral se encontraron niveles estables de azoados y se observó una disminución en el número de infecciones urinarias y de necesidad de hospitalizaciones, lo cual puede servir de base para futuros estudios con mayor muestra, analíticos y prospectivos que demuestren el impacto del reimplante vesicoureteral en la función renal y en las infecciones urinarias en ese grupo de pacientes.