“…Dada la variabilidad de la sintomatología dentro de un mismo diagnóstico global, y para plantear un tratamiento personalizado, cobra gran importancia la valoración (Maggioni et al, 2016: 72) inicial de la persona que acude a rehabilitación. Y, puesto que la lesión puede provocar gran discapacidad, la valoración conjunta de todo el equipo es necesaria (Vasilchenko et al, 2016), abordando desde aspectos psicosocioeconómicos y del entorno de la persona, a cuestiones médicas y farmacológicas, información y formación de ciertas pautas diarias a seguir y de señales de alarma a detectar, así como formación y acondicionamiento físico y asesoramiento en productos de apoyo necesarios para conseguir dos objetivos claves, como son mantener y/o mejorar la calidad de vida, y fomentar la máxima independencia posible (Lo et al, 2016(Lo et al, : 1958(Lo et al, -1968.…”