“…Más allá de las diferencias locales, entre 1939 y 1955 el sistema de transporte urbano de pasajeros estuvo marcado por una situación híbrida: por un lado, estaban las corporaciones estatales de transporte, mayoritariamente municipales, y, por otro, empresarios privados que siguieron operando colectivos y líneas de forma particular. Si bien en 1952 el Estado, mediante la Empresa Nacional de Transporte, se hizo con el control de todo el sistema, a partir de 1955 la mayor parte del mismo fue reprivatizado lentamente hasta comienzos de la década del 60 (Pérez, 2021). En Mar del Plata específicamente, en 1962, se produjo la licitación de las líneas y recorridos distribuyéndose entre 38 empresas, asumiendo la mayoría de ellas la forma de Sociedad de Responsabilidad Limitada.…”