Los libros de memorias juegan un rol importante en la literatura escrita por policías. Sobresalen aquí los relatos del “vigilante de la esquina”, que muestran al policía de antaño y su relación de confianza con la comunidad. En este artículo, se analizan las conexiones entre pasado, memoria y emoción que subyacen a la construcción de este relato, proponiéndose que la nostalgia es una herramienta inherente a la construcción de un determinado sentido del tiempo. Examinar el relato del “vigilante de la esquina” implicará analizar los valores con que la agencia policial se representa y rescatar el rol que las emociones juegan en la reproducción de las tradiciones institucionales.