Aspiraciones Y Proyectos De Futuro De Jóvenes Estudiantes Secundarios en Chile: El Soporte Familiar Y Su Influencia en Las Decisiones Educativo-Laborales

Abstract

RESUMEN: Este artículo analiza las aspiraciones y los proyectos educativos postsecundarios de jóvenes estudiantes chilenos, considerando el rol y la incidencia del soporte familiar en este proceso. Las aspiraciones de cursar estudios superiores es una realidad extendida entre los jóvenes, aunque es posible identificar racionalidades diversas asociadas a las opciones formativas y los itinerarios previstos para alcanzar estos objetivos. El entorno familiar juega un rol importante en la construcción del proyecto personal de los estudiantes, existiendo una alta valoración del soporte que estos brindan para el logro de las metas educacionales. Con todo, la experiencia varía en relación a las características de este apoyo para la toma de decisiones individuales, como también en las estrategias de presión o exigencias para el cumplimiento de obligaciones y objetivos en la educación superior, evidenciándose diferencias importantes de acuerdo al nivel socioeconómico de las familias.

Brechas De Género en La Educación Superior en Chile Y Su Impacto en La Segregación Laboral. Una Revisión Sistemática De La Literatura

“…Luego del egreso de la educación secundaria, último eslabón obligatorio de los 13 años de escolaridad comprometido por ley, viene la elección en la continuidad de estudios superiores. Esta elección, lejos de ser natural, está condicionada a las lógicas de mercado, en donde, producto de la reproducción de desigualdades, se evidencian barreras que el estudiantado proyecta como obstáculos en la consecución de sus estudios superiores (Sepúlveda, 2017;Sevilla et al, 2019). Por ejemplo, en las carreras mineras, tanto técnicas como profesionales la proyección laboral y empleabilidad son bien evaluadas, y representan elementos que se consideran en la elección de formación profesional, sin embargo, existe preocupación por la hegemonía masculina del rubro e incertidumbre por compatibilizar la maternidad (Baena et al, 2020).…”

“…Un estudio realizado en la educación superior técnica, indica que existen tres modalidades marcadas en el funcionamiento del sistema: una que se concentra en la formación profesional y autonomía de las mujeres; otra en función de la disciplina reproduce los roles de género tradicionales; y, una tercera y actual modalidad que implica la incorporación de la perspectiva de género en la formación, pero que está mediada por las lógicas de mercado laboral, es decir, sucumbe a las desigualdades del medio. (Sepúlveda 2017). Otra investigación, realizada en una carrera altamente masculinizada, muestra que, aun cuando desde la formalidad se establezca la perspectiva de género, las alumnas no son capaces de contrarrestar el machismo de sus profesores o de sus compañeros de estudios (Salinas y Romaní, 2020).…”