Feminisms and Psychology in the Contemporary Spanish State

A feminist look at social psychology / Una mirada feminista a la psicología social

“…The interests of this gender or feminist social psychology are many and diverse, and they have changed and expanded over time according to the context and events. The topics of study that have aroused the most interest include (Biglia, 2011;Cabruja & Fernández Villanueva, 2011;Ferrer & Bosch, 2012;Gartzia & Lopez-Zafra, 2014): epistemological reflections on the discipline; reflections on the key constructs in social psychology from a gender or feminist perspective (including gender stereotypes, gender identity, attributions related to gender, intergroup relations, sexist attitudes, etc. ); the development and adaptation of methodological tools to evaluate these constructs; and the analysis of inequalities and discriminations in different fields (physical and mental health; the workplace; education; interpersonal, amorous and partner relations; ageing, violence against women; etc.…”

“…Sin embargo, a pesar de la innegable presencia que han ido adquiriendo, aún estamos lejos de poder afirmar que su incorporación sea una realidad en la cultura y organización institucional (Rebollo, Ruiz, & Vega, 2018), o que exista unanimidad sobre su delimitación conceptual (Cala & Barberá, 2009;Crawford, 2011;Eagly & Riger, 2014), o sobre la perspectiva teórica desde la que han de abordarse, siendo no pocos los/as autores/as que, cuando abordan estas cuestiones, lo hacen desde planteamientos asépticos, desvinculados de posicionamientos feministas, y alejados, por tanto, de cualquier afán transformador (Bonilla, 2014). Más concretamente, este alejamiento no es de extrañar si tenemos en cuenta la incomodidad y las resistencias que, tanto en contextos académicos como sociales, han acompañado a los posicionamientos feministas casi hasta nuestros días (Ballarín, 2013;Biglia, 2011;Cabruja, 2008;García-Dauder, 2010b;Riger, 2016). Este alejamiento se ha materializado en planteamientos como el pionerismo o el mujerismo.…”

“…Los intereses de esta Psicología Social de Género o Feminista son muchos y diversos y han ido modificándose, y ampliándose a lo largo del tiempo en función del contexto y los acontecimientos. Entre los temas cuyo estudio ha despertado más interés cabe mencionar (Biglia, 2011;Cabruja & Fernández Villanueva, 2011;Ferrer & Bosch, 2012;Gartzia & Lopez-Zafra, 2014): las reflexiones epistemológicas sobre la disciplina; la reflexión sobre los constructos clave de la Psicología Social desde una perspectiva de género o feminista (incluyendo, estereotipos de género, identidad de género, atribuciones relacionadas con el género, relaciones intergrupales, actitudes sexistas, etc. ); el desarrollo y adaptación de herramientas metodológicas para la evaluación de estos constructos; o el análisis de las desigualdades y discriminaciones en los distintos ámbitos (la salud física y mental; el ámbito laboral; la educación; las relaciones interpersonales, amorosas y de pareja; el envejecimiento; la violencia contra las mujeres, etc.…”

“…Indeed, there is no dearth of authors who address these issues from aseptic approaches, dissociating themselves from feminist positions and thus from any desire to be transformative (Bonilla, 2014). More specifically, this distance should come as no surprise if we bear in mind the discomfort and resistance that have attended feminist positions in both academic and social contexts virtually until today (Ballarín, 2013;Biglia, 2011;Cabruja, 2008;García-Dauder, 2010b;Riger, 2016). This distancing has materialized in approaches like pioneerism or womanism.…”

Cuestionando la perspectiva de g�nero en la investigaci�n

“…Además, aún no se reconoce suficientemente nuestra valía y se nos ofrecen menos y peores oportunidades de dirección de proyectos y grupos de investigación (Tomás Folch et al, 2015), así como una absoluta minoría de los premios científicos, como si no tuviéramos suficiente capacidad y talento para ello (González Orta et al, 2015). Hay evidencias de que la generización en los tribunales de selección para las plazas tiene relación con la menor selección de las candidatas mujeres (Flora de Pablo, citada en Guil, 2005), lo que complica que las doctorandas acaben sus estudios y prosigan en la carrera investigadora (Biglia, 2011). Datos internacionales muestran que personas pertenecientes a las etnias minorizadas sufren una discriminación parecida (Alexander y Arday, 2015), si bien en nuestros contextos geográficos no disponemos de estadísticas ni análisis.…”