“…(3) En los últimos años, se ha sugerido el papel de TXB-A como agente terapéutico para la hiperplasia prostática benigna (HPB) y otras disfunciones del tracto urinario inferior y sexuales como la hiperactividad de la vejiga/ detrusor hiperactiva, la disinergia del esfínter detrusor-esfínter (DSD), cistitis intersticial/ síndrome de vejiga dolorosa, dolor pélvico crónico y, más recientemente, la eyaculación precoz. (4,5) Su uso en la próstata fue descrito por primera vez por Doggweiler et al, (6) quienes estudiaron en 30 ratas el efecto de la TXB-A, hallando una atrofia generalizada de las células acinares de la próstata, así como una apoptosis glandular difusa. Este efecto se confirmó en 2 estudios posteriores en ratas y perros, respectivamente.…”